Extincion
En biología y ecología, extinción es la desaparición de todos los miembros de una especie o un grupo de taxones. Se considera extinta a una especie a partir del instante en que muere el último individuo de esta. Debido a que su rango de distribución potencial puede ser muy grande, determinar ese momento puede ser dificultoso, por lo que usualmente se hace en retrospectiva. Estas dificultades pueden conducir a fenómenos como el taxón lázaro, en el que una especie que se presumía extinta reaparece abruptamente tras un período de aparente ausencia. En el caso de especies que se reproducen sexualmente, la extinción es generalmente inevitable cuando sólo queda un individuo de la especie, o únicamente individuos del mismo sexo.
A través de la evolución, nuevas especies surgen a través de la especiación, así como también otras especies se extinguen cuando ya no son capaces de sobrevivir en condiciones cambiantes o frente a otros competidores. Normalmente, una especie se extingue dentro de los primeros 10 millones de años posteriores a su primera aparición, aunque algunas especies, denominadas fósiles vivientes, sobreviven prácticamente sin cambios durante cientos de millones de años. La extinción es histórica y usualmente un fenómeno natural. Se estima que cerca de un 99,9 % de todas las especies que alguna vez existieron están actualmente extintas.
Antes de la dispersión de los humanos a través del planeta, la extinción generalmente ocurría en continuo bajo índice, y las extinciones masivas eran eventos relativamente raros. Pero aproximadamente 100.000 años atrás, y en coincidencia con el aumento de la población y la distribución geográfica de los humanos, las extinciones se han incrementado a niveles no vistos antes desde la extinción masiva del Cretácico-Terciario.A esto se le conoce como la extinción masiva del Holoceno, y se estima que para el año 2100 la cantidad de especies extintas podría alcanzar altas cotas, incluso la mitad de todas las especies que existen actualmente.
TIPOS DE EXTINCION
Terminal
Es aquella en que la especie desaparecida no deja ningún tipo de descendencia en ningún lugar, ni con su mismo ADN ni otro evolucionado. En este grupo se ha encuadrado durante mucho tiempo a los dinosaurios, pero ya desde los años ochenta se apuntaba la idea de que dichos reptiles, o al menos una parte de los mismos, si puedo dejar descendencia en las aves. Las extinciones terminales a su vez se dividen en dos:
Extinción masiva
Esta extinción, la más interesante para geólogos y paleontólogos, puede desarrollarse de dos formas: terminando con el 10% de las especies o más en menos de un año y la que necesita hasta tres millones y medio de años, pero aniquila a más de la mitad de las especies.
Extinción de fondo
Es la más común y consiste en la desaparición progresiva de una o varias especies a lo largo de cientos o miles de años hasta no dejar ninguna descendencia. Debido a su lentitud la Naturaleza va reemplazando su nicho ecológico lentamente y no supone un gran trauma para el sistema. Suele ser por cambios en el medio a los que la especie no se adapta debido a factores como su excesiva especialización, el caso de los grandes felinos como el smilodon puede ser un ejemplo. Durante mucho tiempo se pensó que la de los dinosaurios era un caso, pero actualmente se apunta más a un extinción brusca.
Filítica o Pseudoextinción
La demostración de una pseudoextinción es dificultosa, debido a que se requiere evidencia de peso que relacione los miembros de una especie existente con una preexistente. Por ejemplo, en algunas ocasiones se menciona que el Hyracotherium, antiguo animal que compartía un ancestro común con el caballo de hoy en día, está pseudoextinto, debido a que hay varias especies existentes de Equus (el género del caballo), incluyendo a lacebra y el burro. Sin embargo, debido a que las especies fósiles no dejan material genético, no es posible esclarecer si el Hyracotherium evolucionó en las especies modernas del caballo, o si simplemente lo hizo desde un ancestro común con los caballos actuales. En consecuencia, la pseudoextinción suele ser más fácil de demostrar para grupos taxonómicos grandes.Pueden o no existir descendientes de una especie extinta. Estas especies descendientes o hijas evolucionan desde su especie padre con la mayor parte de la información genética de esta última, y aunque la especie ascendiente se extinga, su descendiente puede seguir existiendo. A este hecho también se le llama pseudoextinción.
Para diferenciar la extinción terminal de la extinción filítica (o pseudoextinción) se requiere que ésta se encuentre claramente definida. Si finalmente se declara extinta, la especie en cuestión deber ser claramente distinguida de cualquier otra especie ancestro, descendiente o de otras especies relacionadas. La extinción de una especie (o el reemplazo de ésta por una descendiente) juega un papel clave en la teoría del equilibrio puntuado deStephen Jay Gould y Niles Eldredge.